Una historia de vida....

Cuando éste pequeño llegó a formar parte de mis cotidianos días no imaginé el mundo fantástico que viviríamos juntos...
Teniéndo apenas 3 añitos llegó con un esquema de vida que lo catalogaba como un niño con Necesidades Educativas Especiales referentes a audición, diagnosticado como "sordo profundo", se integraba a mi grupo de niños de 3 años para ser tratado en función de la atención a la diversidad. Inmediatamente detecté que el diagnóstico inicial no coincidía con las respuestas que él tenía con respecto al ambiente, sin embargo, su comportamiento era evidentemente diferente al del resto de los niños; balanceo constante, ausencias prolongadas, resistencia al contacto físico y a la demostración de emociones así como ninguna manifestación de comunicación ni visual, ni oral ni siquiera gutural. El reto estaba en nuestras manos y su encanto en mi corazón, así que las pruebas contundentes se hicieron y el diagnóstico fué determinante,Transtorno Autista.
El trabajo ha sido constante, incansable, determinante conformado por todo un equipo de trabajo.
Hoy mi pequeño solecito cumplió 5 años, que quizá sea intrascendente, todos cumplimos 5 años alguna vez, pero en ésta ocasión llegar a ésta edad con una lucha constante por atrapar al mundo en un instante y disfrutar de la infancia plenamente sugiere de retos mucho mas intensos.
Las gráficas que hoy deseo compartir con ustedes son más que evidentes de lo que un pequeño guerrero ha logrado en medio de éste mundo de silencio y sensaciones diferentes. Un mundo resistente al respeto por las diferencias individuales, un mundo distante a lo que éstos pequeños requieren para ser felices.





Con su piñata de Bob Esponja.
en un abrazo de cariño.

Con todos sus amiguitos de grupo.

cantándole las mañanitas.

Pidiendo un deseo...

( sigo pensando que habrá pedido de deseo... con esa sonrisa y esa expresión de pícaro)

Feliz cumpleaños mi querido Ulises.