Tiempo de reflexión, de gastos y prisas, tiempo de demostrar nuestro amor en envolturas de colores y lazos brillates, tiempo de apretados abrazos y deseos breves, pero intensos...

Tiempo de añoranza, de extrañar y sentir...

Tiempo de compartir la mesa, el brindis, la receta de la abuela y el turrón...

Tiempo de hipocresía, de estar donde tienes que estar y añorar un sitio más cálido y sincero.

Tiempo en que nuestro niño interior despierta y nos habita con la inocencia y la honestidad explosiva...

Tiempo de desear, para todos y un poco más para nosotros mismos, de confrontarnos con nuestras bonanzas y limitaciones...aceptar lo habido y aspirar a un poco más...

Tiempo de dar y quitar...

Tiempo en que se celebra la tradición, el nacimiento del niño Jesús, en donde más que el halo místico, celebramos el nacimiento del Hombre más importante en la historia de nuestras creencias, el nacimiento de un HOMBRE lleno de sabiduría y amor divino, de carne y hueso, de miedos y fortaleza, de convicción y verdad.

Sea pues, amigos mios, ésta fecha de celebración un instante más para encontrarnos con el verdadero AMOR, con la fuerza del universo y el espiritu repleto de gozo.

que sea un instante para recibir del universo lo merecido, LA FELICIDAD PLENA.

y que ésta felicidad se extienda a todos sus seres queridos, a todo el espacio físico en el que habiten y a todo el UNIVERSO.

FELIZ NAVIDAD A TODOS USTEDES.

RECIBAN DESDE MI TIERRA UN ABRAZO APRETADO, Y MILES DE BESOS LLENOS DE ENERGÍA Y CARIÑO.

MI GRATITUD ETERNA POR SER Y ESTAR A MI LADO.

CON TODO MI AMOR.

CRISTINA.