Puedo morder el filo de la aventura con sólo pensarte,

revolver el tiempo para no perderme en el mañana,

disfrazar verdades con excusas diminutas,

esconder pudores que me lleven a extraviarte...

Puedo cerrar los ojos y deslizarme hasta tus ganas,

pasearme por tu instinto con malicia santurrona,

contonear mis dedos por el borde de tus Levis azzules,

y sentir tu taquicardia mientras con tus ojos sigues mi cadencia...

Puedo prolongar el beso que me pierde en sinrazones,

zambullirme en tu mirada que naufraga por mi escote,

distraer tus manos que caminan por mis piernas,

impregnar con mi aroma el delirio del antojo...

Puedo reconocerte en mis silencios,

en el sobresalto de nombrarte,

en la sonrisa que me estrenas,

en el blues de mis caderas,

que me llevan a tu boca.